martes, 4 de mayo de 2010

A UN PASO DE LA HAZAÑA

Velez aplastó a Chivas de principio a fin, pero sólo pudo hacerle 2 goles y se quedó fuera de la Copa Libertadores por el 3 a 0 recibido en el partido de ida.


El mexicano Chivas de Guadalajara se clasificó a los cuartos de final de la Copa Libertadores de América-2010, pese a perder 2-0 con el argentino Vélez Sarsfield la noche del martes en un emotivo partido desquite de octavos disputado en Buenos Aires.


El uruguayo Santiago Silva (3) y Rolando Zárate (89) marcaron los goles para el triunfo de Vélez, aunque no alcanzó para torcer una serie desfavorable, ya que Chivas había ganado 3-0 en el encuentro de ida y avanzó por tener una mejor diferencia de gol.


En los cuartos de final, el conjunto mexicano se enfrentará con el ganador de la serie entre el colombiano Once Caldas y el paraguayo Libertad, que igualaron en cero en el primer partido en Manizales.

Forzado a intentar una auténtica hazaña por la severa caída en Guadalajara, Vélez entró en el partido dispuesto a llevarse por delante a Chivas y tratar de recortar la distancia desde el comienzo.


Ese objetivo lo cumplió, porque apenas iban tres minutos cuando Moralez envió un centro perfecto para el cabezazo cruzado de Silva, que dejó sin posibilidades al arquero visitante, Liborio Sánchez.


Envalentonado por la ventaja, Vélez se apoderó por completo del balón y del terreno y encerró contra su campo a un adversario que se vio obligado a retroceder en forma masiva, y a disponer un cerrojo con hasta cinco defensas para tratar de contener los embates del equipo local.


Con Emiliano Papa convertido en un volante más por la izquierda, y los desbordes de Gastón Díaz por derecha, Vélez intentó abrir los espacios, además de contar con el despliegue constante de Silva, encargado de pivotear'' en el ataque e ir también en busca de la definición.


El Tanque'' Silva tuvo en su pie derecho el segundo tanto, pero Sánchez empezó a exhibir seguridad al quitarle un remate con destino de red, y luego contener otro cabezazo del uruguayo y un bombazo de media distancia de Somoza que amenazaba colarse en un ángulo.


La intensidad y el esfuerzo realizado le costaron un ligero bajón en la parte final a Vélez y Chivas salió un poco del asedio, y hasta contó con una ocasión para alcanzar la igualdad, con un sorpresivo disparo de media distancia de Mejía que salvó Barovero.


El 1-0 era un resultado muy escueto para el impulso arrollador de un Vélez que, de todos modos, nunca se dio por vencido y siguió intentando hasta el último segundo.


No varió el desarrollo en la segunda parte, porque Vélez mantuvo el dominio, pero una y otra vez chocaría contra la solidez de Sánchez, que se lució al contener un cabezazo de Hernán López y desviar un remate potentísimo del ingresado Ricardo Alvarez.


Chivas intentó jugar lo mejor posible el balón el poco tiempo que lo tuvo disponible, y tuvo una última ocasión con un zurdazo del juvenil Dávila que Barovero desvió al córner.


A pura ofensiva, Vélez terminó jugando con dos volantes ofensivos (Alvarez y Martínez) y tres delanteros, los uruguayos Silva y López, y el ingresado Zárate, pero entre desajustes en la definición y virtudes de Sánchez y del capitán Reynoso en la zaga le impidieron ampliar distancias.


El encuentro igualmente tendría un epílogo dramático, ya que Zárate marcó a los 89 minutos el 2-0 con un cabezazo, pero Chivas, a pesar de haber sido superado de comienzo a fin, consiguió salir airoso de una serie para la que había sacado un buen porcentaje en su bastión de Guadalajara.


Alineaciones:

2: Vélez: Marcelo Barovero; Fabián Cubero, Sebastián Domínguez, Nicolás Otamendi, Emiliano Papa; Gastón Díaz (Juan Martínez), Leandro Somoza, Víctor Zapata (Rolando Zárate); Maxi Moralez (Ricardo Álvarez); Hernán López y Santiago Silva. DT: Ricardo Gareca.

0: Chivas: Liborio Sánchez; Omar Esparza, Christian Pérez, Héctor Reynoso, Miguel Ponce; Jorge Enriquez (Patricio Araujo), Edgar Solís, Edgar Mejía, Mario De Luna; Omar Bravo (Xavier Báez) y Omar Arellano. DT: José Luis Real.

Árbitro: Wilson Seneme (BRA).

Estadio: José Amalfitani ante unos 37.000 espectadores.

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