El cuadro crema se encontró con su clón, un rival que tuvo un despliegue generoso y una marca asfixinte con lo que complicó al cuadro de Reynoso, que sin un hombre diferente se volvió muy predecible.
El grito de Libertad se ahogó anoche en el coloso de Ate, pero no por eso la esperanza dejó de sumar acólitos. Preso al esquema, fiel al libreto del entrenador, limitado a esperar el error del rival, Universitario forjó el empate.
Cuando la fortaleza del equipo crema en esta Copa es precisamente ser dueño de la cancha y de la pelota para tejer su camino al triunfo, ayer se llenó de cautela.
Aún cuando en casa hay que ganarlo todo, reza también una vieja sentencia del fútbol que si un partido no se puede ganar, entonces no hay que perderlo, y fue evidente que tanto local como visita, guardaron sus cartas para jugárselas en la revancha de Paraguay.
Juan Máximo Reynoso lanzó al ruedo a Víctor Píriz en premio a sus actuaciones en el torneo local, y de algún modo aprovechar, como único punta, sus dotes de cazador, ya que el esquema 4-2-3-1 exigía correrlo por las bandas para taparlo a Libertad y quitarle el vértigo que lo hace favorito en cualquier parte.
Así las cosas, Javier Torrente también tiró al ruedo a Gamarra, Velásquez y Gonzales en el supuesto de ganarlo a la contra, pero sin espacios, ambos cayeron en la neutralidad. Y se hizo el silencio.
Duros ambos atrás, si la “U” se adueñó por las bandas, Libertad atrofió el mediocampo merengue para complicar a la zona pensante donde destacaron poco sus conductores “Cachito” Ramírez y Rainer Torres.
Apenas algunos amagos de Velásquez o alguna pelota parada de “Fito” Espinoza que desvió el arquero Medina insinuó algo más, que lo hecho por Piero Alva que se fue diluyendo con los minutos, o la muerte por inanición del “Petete” Píriz que no tuvo una sola clara para el mano a mano, y así no se puede.
Y fue tanta la desesperación del hincha, que uno sacó un puntero láser para quemarle la película a los jugadores de Libertad, empero al igual que sus ídolos, estuvo desatinado en la puntería y no le dio. Y así no se puede
En el tramo final, los guaraníes se adueñaron del terreno y treparon sobre el área crema. Tocaron como seguro lo harán en Asunción y entonces complicaron con Ayala por arriba y una media chalaca de Román. Después Velásquez le pegó mal y en la réplica, Píriz se buscó una falta para el tiro libre del “Fito”, pero nada cambiaría el marcador.
El empate ayuda a la “U” y así lo asumen los cremas. Todavía queda un partido de local (contra Blooming) y dos de visitante para lograr el pase a octavos de final, así que no hay que desesperarse. Lanús está lejos. Y si se dan los resultados lógicos, el equipo argentino seguirá más lejos.
Cuando la fortaleza del equipo crema en esta Copa es precisamente ser dueño de la cancha y de la pelota para tejer su camino al triunfo, ayer se llenó de cautela.
Aún cuando en casa hay que ganarlo todo, reza también una vieja sentencia del fútbol que si un partido no se puede ganar, entonces no hay que perderlo, y fue evidente que tanto local como visita, guardaron sus cartas para jugárselas en la revancha de Paraguay.
Juan Máximo Reynoso lanzó al ruedo a Víctor Píriz en premio a sus actuaciones en el torneo local, y de algún modo aprovechar, como único punta, sus dotes de cazador, ya que el esquema 4-2-3-1 exigía correrlo por las bandas para taparlo a Libertad y quitarle el vértigo que lo hace favorito en cualquier parte.
Así las cosas, Javier Torrente también tiró al ruedo a Gamarra, Velásquez y Gonzales en el supuesto de ganarlo a la contra, pero sin espacios, ambos cayeron en la neutralidad. Y se hizo el silencio.
Duros ambos atrás, si la “U” se adueñó por las bandas, Libertad atrofió el mediocampo merengue para complicar a la zona pensante donde destacaron poco sus conductores “Cachito” Ramírez y Rainer Torres.
Apenas algunos amagos de Velásquez o alguna pelota parada de “Fito” Espinoza que desvió el arquero Medina insinuó algo más, que lo hecho por Piero Alva que se fue diluyendo con los minutos, o la muerte por inanición del “Petete” Píriz que no tuvo una sola clara para el mano a mano, y así no se puede.
Y fue tanta la desesperación del hincha, que uno sacó un puntero láser para quemarle la película a los jugadores de Libertad, empero al igual que sus ídolos, estuvo desatinado en la puntería y no le dio. Y así no se puede
En el tramo final, los guaraníes se adueñaron del terreno y treparon sobre el área crema. Tocaron como seguro lo harán en Asunción y entonces complicaron con Ayala por arriba y una media chalaca de Román. Después Velásquez le pegó mal y en la réplica, Píriz se buscó una falta para el tiro libre del “Fito”, pero nada cambiaría el marcador.
El empate ayuda a la “U” y así lo asumen los cremas. Todavía queda un partido de local (contra Blooming) y dos de visitante para lograr el pase a octavos de final, así que no hay que desesperarse. Lanús está lejos. Y si se dan los resultados lógicos, el equipo argentino seguirá más lejos.
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